5 Consejos de Gestión de Proyectos para Equipos de Marketing

La gestión de proyec­tos desem­peña un papel sig­ni­fica­ti­vo en las empre­sas que fab­ri­can pro­duc­tos o pro­por­cio­nan ser­vi­cios en diver­sos cam­pos. El mar­ket­ing no es una excep­ción. Aquí, la gestión de proyec­tos pro­por­ciona equipos de mar­ket­ing con plan­i­fi­cación estruc­tura­da, mon­i­toreo del esta­do del proyec­to y su final­ización opor­tu­na. Para obten­er el máx­i­mo prove­cho del enfoque, le acon­se­jamos que util­ice con­se­jos útiles. Aquí hay algunos de ellos.

¿Por qué es impor­tante una bue­na gestión de proyec­tos para los equipos de marketing?

Para enten­der la impor­tan­cia de la gestión de proyec­tos para los equipos de mar­ket­ing, vale la pena delin­ear las car­ac­terís­ti­cas de dichos equipos:
  • Cre­ativi­dad. El mar­ket­ing a menudo es imposi­ble sin este com­po­nente. Por ejem­p­lo, la idea de un proyec­to de mar­ket­ing como el desar­rol­lo de una nue­va mar­ca o cam­paña pub­lic­i­taria es algo que no se puede imple­men­tar sin cre­ativi­dad y per­spec­ti­vas no están­dar sobre cosas ordinarias.
  • Enfoque en las necesi­dades del cliente. Los proyec­tos de mar­ket­ing deben sat­is­fac­er en últi­ma instan­cia las necesi­dades tan­to del cliente como del públi­co obje­ti­vo. Por lo tan­to, es extremada­mente impor­tante enfo­carse en enten­der sus necesi­dades y pref­er­en­cias. De esta man­era, será posi­ble garan­ti­zar que el pro­duc­to o ser­vi­cio final cumpla con las necesi­dades de los clientes.
  • Pla­zos. Los proyec­tos de mar­ket­ing a menudo tienen pla­zos especí­fi­cos. Aquí debe quedar claro que des­de el prin­ci­pio se estable­cen tenien­do en cuen­ta las condi­ciones del mer­ca­do. Por lo tan­to, retra­sos ines­per­a­dos en el pro­ce­so de tra­ba­jo pueden lle­var à la lib­eración intem­pes­ti­va del pro­duc­to, hacién­do­lo inútil. Y un pro­duc­to que no se ajustó a tiem­po a las deman­das del mer­ca­do puede no ser rel­e­vante. Por lo tan­to, la gestión de proyec­tos en mar­ket­ing debe ser lo sufi­cien­te­mente flex­i­ble para adap­tarse a todos estos cam­bios, garan­ti­zan­do al mis­mo tiem­po la disponi­bil­i­dad opor­tu­na del producto.
  • Coop­eración con otros depar­ta­men­tos. Los proyec­tos de mar­ket­ing a menudo impli­can una estrecha inter­ac­ción con otros espe­cial­is­tas: dis­eñadores, redac­tores, anal­is­tas, etc. En con­se­cuen­cia, la gestión de proyec­tos debe facil­i­tar una comu­ni­cación efec­ti­va entre equipos con difer­entes especializaciones.
  • Indi­cadores impor­tantes. Los proyec­tos de mar­ket­ing deben ser med­i­bles y ten­er indi­cadores claros de pro­gre­so y éxito.


Tenien­do esto en cuen­ta, pase­mos a lo que la gestión de proyec­tos da a los equipos de marketing.

En primer lugar, per­mite la descom­posi­ción, divi­di­en­do proyec­tos com­ple­jos en tar­eas mane­jables. Después de eso, puede dis­tribuir respon­s­abil­i­dades entre los miem­bros del equipo, ase­gu­ran­do que todos tra­ba­jen en el mis­mo espa­cio y puedan eval­u­ar ade­cuada­mente el esta­do de las cosas. Las her­ramien­tas de gestión de proyec­tos para agen­cias de mar­ket­ing pueden ayu­dar con esto. Per­miten a los espe­cial­is­tas en mar­ket­ing seguir el pro­gre­so, estable­cer pla­zos e iden­ti­ficar lim­ita­ciones poten­ciales antes de que se con­vier­tan en problemas.

Además, una bue­na gestión de proyec­tos facili­ta la comu­ni­cación y colab­o­ración entre los miem­bros del equipo (o equipos) y los clientes, ase­gu­ran­do que todos ten­gan la infor­ma­ción que nece­si­ta para hac­er su parte del tra­ba­jo. Aquí, por supuesto, no se puede pre­scindir de bases de conocimien­to inter­nas, ras­treadores de tar­eas inte­gra­dos con men­sajeros, grá­fi­cos de Gantt, etc.

Otra ven­ta­ja de la gestión de proyec­tos es un enfoque estruc­tura­do para la gestión en su conjunto.

La gestión de proyec­tos hace que los pro­ce­sos de gestión de proyec­tos de mar­ket­ing sean más pre­deci­bles, ayu­da a los equipos a reg­is­trar indi­cadores de rendimien­to dig­i­tal, aumen­tar la efi­cien­cia y la pro­duc­tivi­dad, mien­tras reduce el ries­go de ago­tamien­to y rotación de personal.
Además, una gestión de proyec­tos efec­ti­va per­mite a los equipos de mar­ket­ing adap­tarse ráp­i­da­mente a las cir­cun­stan­cias cam­biantes y condi­ciones del mer­ca­do, ase­gu­ran­do su competitividad.



Final­mente, la gestión de proyec­tos se con­vierte en la base para el crec­imien­to con­tin­uo, per­mi­tien­do a los equipos apren­der de sus éxi­tos y fra­ca­sos, mejo­ran­do los pro­ce­sos con el tiempo.

Aho­ra está claro hacia dónde se apun­ta la gestión de proyec­tos para los equipos de mar­ket­ing. Así que pase­mos a los con­se­jos que le ayu­darán a obten­er el mejor resul­ta­do posible.

Con­se­jo #1. Defi­na metas y obje­tivos claros

Más arri­ba diji­mos que los indi­cadores dig­i­tales son de gran impor­tan­cia en los proyec­tos de mar­ket­ing. Para que refle­jen cor­rec­ta­mente el esta­do del proyec­to y se actu­al­i­cen opor­tu­na­mente, deben estable­cerse los obje­tivos de tra­ba­jo. Su eje­cu­ción com­ple­ta sig­nifi­cará que todo está 100% hecho.

Para facil­i­tar el tra­ba­jo, y evi­tar que la meta final sea demasi­a­do lejana e inal­can­z­able, se elab­o­ra un lis­ta­do de tar­eas que acer­ca al equipo al resul­ta­do final. En con­se­cuen­cia, el tra­ba­jo en cada tarea tam­bién se reg­is­tra. Los resul­ta­dos vis­i­bles real­mente moti­van al equipo.



Por ejem­p­lo, todo el proyec­to se divide en cin­co eta­pas prin­ci­pales. Cada eta­pa tiene tres eta­pas inter­me­dias. Cuan­do el equipo ve que ha com­ple­ta­do la primera de las eta­pas prin­ci­pales y ya ha hecho un ter­cio de la segun­da, las per­sonas entien­den que están avan­zan­do. Cuan­do los hitos tam­bién están lig­a­dos a cal­en­dar­ios y pre­supuestos, es aún más fácil para el equipo y el cliente medir el rendimiento.

Pero aquí hay un pun­to más impor­tante: todos los par­tic­i­pantes en el pro­ce­so deben cono­cer los obje­tivos y metas. Ideal­mente, cuan­do son acor­da­dos a través de una dis­cusión común. Es decir, el equipo no solo es infor­ma­do de los obje­tivos y pla­zos de imple­mentación, sino que tam­bién dis­cute cuán real­is­tas son. Inclu­so en el caso en que las deci­siones sobre los pla­zos y el alcance del tra­ba­jo son tomadas por ger­entes de alto niv­el y líderes de equipo, es nece­sario infor­mar a cada emplea­do de la man­era más clara y detal­la­da posible.

Tam­bién es impor­tante ase­gu­rarse de que todos entien­dan qué nece­si­ta hac­erse y cuán­do. Aquí pasamos al sigu­iente pun­to impor­tante. Los obje­tivos locales deben alin­earse con la estrate­gia gen­er­al. Esto es impor­tante por las sigu­ientes razones:
  1. Tasas de éxi­to más altas. Este estu­dio encon­tró que las empre­sas sin prob­le­mas de alin­eación eran un 72% más renta­bles que sus competidores.
  2. Tra­ba­jo claro con pri­or­i­dades. Cuan­do los emplea­d­os cono­cen los obje­tivos estratégi­cos del proyec­to, es más fácil para ellos com­pren­der qué obje­tivos inter­me­dios y tar­eas tienen un impacto sig­ni­fica­ti­vo en su logro. En con­se­cuen­cia, dicho tra­ba­jo tiene una may­or prioridad.
  3. Com­pren­sión de la propia con­tribu­ción al resul­ta­do gen­er­al. Esto es impor­tante porque una per­sona que se siente valiosa gen­eral­mente rinde mejor. Para sen­tir esta impor­tan­cia, no hay que adiv­inar, sino saber cuál es el val­or de un tra­ba­jo en particular.
Así que, no olvide comu­nicar los obje­tivos y metas al equipo y a cada indi­vid­uo. Sí, puede pare­cer que se está toman­do demasi­a­do tiem­po, pero es mejor comu­nicar la infor­ma­ción, escuchar las pre­gun­tas y respon­der­las antes de realizar las tar­eas. Al final, esto dará un mejor resul­ta­do que cor­re­gir errores cometi­dos por fal­ta de información.

Con­se­jo #2. Cree un plan de mar­ket­ing detal­la­do para el proyecto

La impor­tan­cia de la plan­i­fi­cación es difí­cil de sobrees­ti­mar, porque afec­ta lit­eral­mente todos los pro­ce­sos pos­te­ri­ores. Por lo tan­to, cuan­to más detal­la­do sea su plan, may­or será la prob­a­bil­i­dad de que se com­plete a tiem­po y real­mente bien.



Si el plan está solo en una for­ma gen­er­al­iza­da, existe el ries­go de que se hayan pasa­do por alto detalles impor­tantes, y esto sur­girá solo cuan­do se acerquen los plazos.

Para hac­er su plan­i­fi­cación más efec­ti­va, con­sidere los sigu­ientes pasos:
  1. Involu­cre no solo a los líderes del equipo en la plan­i­fi­cación, sino tam­bién a otros emplea­d­os. Men­cionamos esto ante­ri­or­mente. Las dis­cu­siones se vuel­ven espe­cial­mente impor­tantes cuan­do el proyec­to impli­ca colab­o­ración entre difer­entes depar­ta­men­tos. A veces, las opin­iones de difer­entes espe­cial­is­tas per­miten una esti­mación de tiem­po más precisa.
  2. Evalúe los ries­gos y encuen­tre man­eras de ges­tionar­los. Aquí, nue­va­mente, es una bue­na idea involu­crar a rep­re­sen­tantes de todos los depar­ta­men­tos rel­e­vantes en la plan­i­fi­cación para ver la may­or can­ti­dad de prob­le­mas poten­ciales posible.
  3. Real­ice una reunión gen­er­al con los rep­re­sen­tantes del cliente y los con­tratis­tas. Esto ase­gu­rará que todos ten­gan una mis­ma com­pren­sión de los obje­tivos y el pro­gre­so futuro del trabajo.
  4. Util­ice los mejores sis­temas de gestión de proyec­tos. Ellos le per­mi­tirán ten­er todo lo que nece­si­ta para un tra­ba­jo coor­di­na­do y pro­duc­ti­vo en un solo espacio.
  5. Esté dis­puesto a cam­biar. Inclu­so si el plan le parece per­fec­to, no debe ape­garse a él a toda cos­ta. Es mejor hac­er cam­bios, si es nece­sario, por ejem­p­lo, por la situación del mercado.

Con­se­jo #3. Preste máx­i­ma aten­ción a las comunicaciones

Cuan­do la plan­i­fi­cación esté com­ple­ta, se puede esper­ar que todo sea trans­par­ente y pre­deci­ble: todos sim­ple­mente comen­zarán a hac­er las tar­eas que se les asignaron.

De hecho, esto no siem­pre sucede. Muy a menudo, los prob­le­mas apare­cen debido a difi­cul­tades con las comu­ni­ca­ciones. Alguien no entendió dónde bus­car infor­ma­ción, alguien olvidó respon­der la solic­i­tud, y alguien no pro­por­cionó acce­so opor­tuno, por ejem­p­lo, al servi­dor de prue­ba. Como resul­ta­do, los prob­le­mas no resuel­tos se acu­mu­lan, algu­nas tar­eas se real­izan al azar y algu­nas quedan sin hacer.

Para evi­tar esto, todas las partes intere­sadas deben comu­ni­carse: por escrito, en voz, en gestores de tar­eas, etc. No hay man­era de ges­tionar proyec­tos de mar­ket­ing dig­i­tal sin ello.


Comu­ni­cación den­tro de una tarea en el sis­tema de gestión de proyec­tos Worksection
La solu­ción ópti­ma sería usar ser­vi­cios de gestión de proyec­tos, que pro­por­cio­nan her­ramien­tas para la comu­ni­cación. Por ejemplo,
  1. comen­tar­ios sobre tareas;
  2. la posi­bil­i­dad de adjun­tar archivos de var­ios formatos;
  3. inte­gración con correo y/o mensajeros;
  4. chat incor­po­ra­do.
Cuan­do el equipo tiene todo lo ante­ri­or o gran parte de ello, defin­i­ti­va­mente habrá menos prob­le­mas con la comu­ni­cación. Para reducir­los al mín­i­mo, puede redac­tar las reg­u­la­ciones de comu­ni­cación. Por ejem­p­lo, las pre­gun­tas urgentes deben hac­erse en el men­sajero, y la infor­ma­ción que no requiere una respues­ta ráp­i­da puede dejarse en un comen­tario à la tarea.

Con­se­jo #4. Mon­i­toree con­stan­te­mente el pro­gre­so del proyecto

Aún en sus pen­samien­tos, no debe asumir que el tra­ba­jo puede hac­erse bien sin una com­pren­sión clara del esta­do de las cosas en cada momen­to específico.

El con­trol es espe­cial­mente impor­tante en proyec­tos a gran escala que involu­cran a muchas per­sonas. Al pasar por alto algo pequeño, pron­to puede ten­er un prob­le­ma, cuya res­olu­ción cues­ta demasi­a­do. No se tra­ta de micro­gestión, que per­ju­di­ca a los proyec­tos y a los equipos, sino de con­trol oportuno.

Por lo tan­to, vale la pena uti­lizar her­ramien­tas de gestión de proyec­tos para agen­cias de mar­ket­ing, que ofre­cen fun­ciones de con­trol y mon­i­toreo. Por ejem­p­lo, grá­fi­cos de Gantt, tableros Kan­ban, pan­e­les de proyec­to, etc.


Pan­el de Con­trol del Proyec­to en Worksection
Esto es real­mente con­ve­niente, porque per­mite al ger­ente ver en una pan­talla si el proyec­to avan­za según lo planea­do. En caso de prob­le­mas, se pueden estu­di­ar los indi­cadores y averiguar qué hac­er para nive­lar la situación. Cuan­do hay var­ios proyec­tos (y esto es común en los equipos de mar­ket­ing), es casi imposi­ble mon­i­tore­ar el esta­do ráp­i­da­mente sin tales herramientas.

Para que este con­se­jo fun­cione, vale la pena decir a todos los emplea­d­os que dicho soft­ware es útil para todos y no es una her­ramien­ta de repre­sión en absoluto.

Por el con­trario, los ser­vi­cios avan­za­dos le recuer­dan a tiem­po sobre las tar­eas cuyo pla­zo se acer­ca, y tam­bién pueden mostrar que un deter­mi­na­do emplea­do tiene, por ejem­p­lo, una car­ga de 40 horas esta sem­ana. Por lo tan­to, tratar de dar­le una can­ti­dad adi­cional de tra­ba­jo no es recomendable.

Puede pare­cer que es posi­ble mon­i­tore­ar indi­cadores clave de for­ma man­u­al. De hecho, sí, pero tales cosas lle­van mucho tiem­po, por lo que la toma de deci­siones no será ráp­i­da, y en mar­ket­ing, a menudo hay que actu­ar ráp­i­da­mente para ten­er éxito.

Con­se­jo #5. Reg­istre todo lo que pueda

Al respon­der la pre­gun­ta de cómo mejo­rar en mar­ket­ing o en cualquier otro cam­po, debe enten­der­se que la clave para la mejo­ra con­tin­ua de los equipos indi­vid­uales y de la empre­sa en su con­jun­to es la expe­ri­en­cia. Al mis­mo tiem­po, no debe acu­mu­la­rse en las cabezas de emplea­d­os indi­vid­uales, sino en documentos.

Es nece­sario reg­is­trar tan­to deci­siones exi­tosas como fra­ca­sos. En el futuro, esta infor­ma­ción ayu­dará a evi­tar errores y per­mi­tirá a los prin­cipi­antes resolver tar­eas de la man­era más efi­ciente posi­ble basa­da en expe­ri­en­cias pasadas.

Estos con­se­jos para ges­tionar equipos de mar­ket­ing segu­ra­mente entre­garán resul­ta­dos si se inte­gran en la vida de su nego­cio. Si los sigue de man­era sis­temáti­ca y clara, los cam­bios pos­i­tivos en el tra­ba­jo apare­cerán bas­tante rápi­do. Con el tiem­po, enten­derá cómo uti­lizar cada uno de los con­se­jos en el tra­ba­jo en equipo, tenien­do en cuen­ta las car­ac­terís­ti­cas de su nego­cio y las necesi­dades de sus clientes.

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